Todo indica, según los expertos consultados, que es más probable que los efectos del confinamiento hagan que aumenten los divorcios y que seguiremos el patrón de China en lo relacionado con la crisis del coronavirus, dándose un repunte de nulidades matrimoniales en dicha etapa que por ende, no sabemos cuando terminará y sobre todo, en qué nivel de incertidumbre nos tendremos que mover.
El teletrabajo, además, no ayuda, ya que no estamos acostumbrados a estar entre cuatro paredes casi las 24 horas del día y resulta bastante angustioso.
Hombres y mujeres sufren el dolor de la separación y vivimos en una sociedad donde es un hecho que las mujeres sienten un mayor dolor tras la ruptura de pareja, pues puntuan más alto en las escalas de dolor físico y emocional.